Si queremos que nuestros hijos sean personas independientes y capaces de tomar sus propias decisiones sin temor a equivocarse, es fundamental inculcar actitudes autónomas que fomenten la responsabilidad desde pequeños. Estas son algunas que puedes hacer para crear niños autónomos:
● Deja que tomen sus propias decisiones
Para ser autónomo es necesario saber tomar la mejor decisión, que sea eficaz y que beneficie a todos. Esto lo puedes inculcar en los niños dándole la oportunidad de elegir entre pequeñas decisiones como: elegir el menú para la cena, qué ropa ponerse para salir etc. También es importante poner situaciones donde el niño tenga que asumir las consecuencias de sus decisiones.
Pueden decidir entre hacer la tarea antes o después de comer y si no las hacen no pueden ver la televisión. De esta manera el niño comenzará a tener un mejor entendimiento sobre la toma de decisiones y aprenderán a valorar las consecuencias que pueden traer.
● Dales pequeñas responsabilidades que se apeguen a su edad
La responsabilidad es un valor fundamental para hacer niños autónomos, la manera en la que podemos fomentar esto es darles pequeñas tareas que puedan realizar como: vestirse por sí solos, recoger sus juguetes, poner la mesa, etc. Es importante que no le hagamos todo al niño, en su lugar hay que demostrarle como se hace para que él después pueda hacerlo por sí mismo y sin que nadie le diga.
● Fomenta la seguridad en sí mismo
Dales pequeños elogios cuando logren hacer solos una tarea por primera vez, esto ayudará a su autoestima y les ayudará a tener una mejor comprensión de sus habilidades. Esto también los impulsará a seguir mejorando para recibir elogios. Es importante que cuando tengan dificultades para hacer algo no criticarlos sino reconocer su esfuerzo y apoyarlos a aprender.
● Evita sobreprotegerlo
Es importante no tratar de hacer todo por el niño con tal de evitar que fracase o se lastime, los errores nos ayudan a ser mejores y el privarlos de ellos los vuelve indiferentes a intentar algo nuevo en primer lugar porque saben que tienen a sus padres para hacerlo por ellos.
Con estas acciones, podemos formar niños independientes que tengan una mayor consciencia sobre sí mismos y su entorno y sentarán las bases para que en su vida adulta tengan esa capacidad tan importante de tomar decisiones responsables y benéficas para ellos y quienes los rodean.