En nuestro tiempo difícilmente ponemos en duda que la lectura es muy importante. De hecho, lo oímos en todas partes. Pero, ¿por qué? Más allá de habilidades verbales, una buena ortografía y buen vocabulario, la lectura ofrece muchos otros beneficios. ¿Quieres saber cuáles? Sigue leyendo.
El hábito y el gusto por la lectura enriquecen la vida de cualquier persona y de cualquier edad, ampliando sus horizontes mentales e imaginativos, pero son especialmente importantes en las etapas tempranas de la niñez y la adolescencia.
Además de brindarles una forma de entretenimiento muy sana, leer les aporta una serie de beneficios y habilidades muy particulares que sería un desperdicio no aprovechar. Aquí te contamoo 8 beneficios para empezar:
8 beneficios de la lectura en la niñez
- Adquisición de vocabulario. Se trata de uno de los beneficios más obvios, pero en las etapas de desarrollo, las nuevas palabras caen en un suelo fértil, echan raíz y generan conexiones que impulsan su expresión verbal y durarán toda la vida.
- Impulsa la creatividad. En nuestro mundo la creatividad está en todas partes y es altamente valorada en todos los ámbitos de la vida, tanto personales como profesionales. Al leer, l@s niñ@s aprenden que todo es posible. Además aprender que cualquier situación o problema puede verse y solucionarse de distintas maneras.
- Mayor comprensión lectora. Niños y niñas que leen cotidianamente no sólo comprenden más, también comprenden mejor.
- Concentración y consistencia. La lectura les enseña paciencia al invertir tiempo y una atención sostenida en una sola actividad. Esta habilidad de concentrarse se traduce a otras áreas, como la escuela o una conversación, y les ayuda en situaciones frustrantes y que requieren perseverancia. Al leer un libro completo, l@s niñ@s experimentan la satisfacción de terminar algo.
- Desarrollo de la identidad. Al encontrarse con distintos libros, l@s chic@s empiezan a descubrir lo que les interesa, lo que no les gusta, lo que les gustaría conocer. Esto, a su vez, ayuda a construir su propia noción de sí mismos como personas individuales.
- Un cerebro bien ejercitado. Desde el establecimiento de nuevas conexiones neuronales, hasta la mejora de la memoria, el cerebro está en constante trabajo
- Curiosidad por el mundo que les rodea. Los libros les enseñan sobre todo lo que existe en el mundo. Rodearles de distintos tipos de libros les supone un aprendizaje constante y eficaz.
- Empatía. Al leer sobre otras realidades, otras culturas, posturas ante la vida y otras maneras de ver el mundo, l@s niñ@s se ponen en el lugar del otro y aprenden a no juzgar tan rápidamente lo que es diferente a ell@s.
Estos son sólo algunos de los beneficios que tu hij@ tiene al alcance de la mano; pero existen muchos más. ¡Descúbranlos junt@s!