Vivimos en una era donde la información se encuentra al alcance de nuestras manos. Entre todo este mar de información es muy importante contar con un pensamiento crítico y reflexivo. Tener un pensamiento crítico nos permite discernir entre lo cierto en lo falso, entre lo importante y lo superficial.
Es una herramienta que nos ayuda a formar nuestra propia opinión y es una habilidad que los niños, niñas y jóvenes deben de aprender así como aprenden a leer, escribir y más. ¿De qué manera se puede desarrollar el pensamiento crítico de los jóvenes? Conoce algunas estrategias para hacerlo:
- Enseña a dudar. No sé trata de crear desconfianza en los jóvenes sino invitarlos a dudar lo que leen, a no dejarse llevar por la primera fuente de información que encuentran y a corroborar datos en diferentes sitios para asegurar su autenticidad.
- Pregunta. Una gran manera de fomentar el pensamiento crítico es plantear preguntas como “¿qué opinas?” o “¿por qué?”. Hacer esto ayudará a que tu hijo o hija se cuestione las cosas en lugar de tomarlas por sentado.
- Promueve el conocimiento. Para opinar sobre algo es importante conocer sobre ello con anterioridad. Alienta a que tu hijo o hija investigue y conozca más sobre diferentes temas. Expandir sus horizontes también ayuda a desarrollar el pensamiento crítico.
- Justifica. Enséñale a tu hijo o hija a siempre justificar sus argumentos, de lo contrario parecen flojos y podrían no ser tomados en cuenta. Fomenta en un hijo o hija la argumentación y el análisis de las cosas.
Una vez desarrollado el pensamiento crítico tu hijo o hija será capaz de tener su propia opinión respecto a un tema, teniendo en cuenta los pros y contras que pueda tener. Se trata de una habilidad que debe ser trabajada con el tiempo pero que es fundamental para su desarrollo personal y educativo.